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“Quien quiera seguirme, niéguese asimismo, cargue con su cruz y siga”

 
Con esta frase Bíblica se identifica la Hermana Maury del Valle Cohelo, desde que comenzó su proceso vocacional en su infancia.
Esta religiosa, invitada especial al programa Testigos de fe, este 21 de mayo, emitido, nació en la Guaira estado Vargas-Venezuela, ciudad donde realizó sus estudios primarios y segundarios. Los estudios universitarios los ejecutó en la Universidad Católica de Oriente en Rionegro, Antioquia, terminándolos en la Universidad Juan de Castellanos, institución que la tituló como Licenciada en Ciencia Religiosa y Ética, posteriormente realizó en la universidad Católica de Pereira un Diplomado de Bioética.
 
Formada en una familia basada en valores, como el respeto hacia los demás y la palabra de Dios, la infancia de la hermana Maury transcurre con el compromiso de estar siempre en grupos de la parroquia, donde llama su atención en la infancia misionera. “Asistía a otras parroquias para estar en el grupo de infancia misionera”, recuerda.
 
A los 10 años, su atención fue puesta en su parroquia, ya que en ella no existía un grupo para niños. Inquieta y con el compromiso creciente con “las cosas de Dios”, se acercó a su párroco, manifestándole que  “había la necesidad de organizar un grupo de infancia misionera en la parroquia”. El padre lo permitió y con ayuda de una religiosa, que apoyaba la acción pastoral en la comunidad, se organizó el grupo de infancia misionera, “desde ese momento comencé a orientar mi camino vocacional”.
 
Por cuatro años sirvió como catequista. Estando en este contexto, asistía a reuniones o  actividades de la parroquia “yo me daba cuenta que estas actividades de la Iglesia alegraban mi vida, y  comparaba esa  alegría con las fiestas a las que asistía con mis amigos y veía que no era lo mismo”.
 
Desde ese momento guió su corazón y comenzó a fijarse en comunidades religiosas, hasta llegar a la comunidad a la que hoy pertenece: Siervas del Santísimo y la Caridad, consagrándose el 6 de enero de 1995.
 
Sus promotores vocacionales, como la hermana Teresa Hoyos Pineda y el sacerdote Oscar Gil fueron de gran ayuda para el camino vocacional que tomo la Religiosa.  
 
Entre sus gustos por la música, el canto, la lectura y el deporte se encuentran personajes como Martin Valverde, cantautor Costarricense de música católica contemporánea; almira al escritor y novelista Pablo Cohelo; guía su atención a libros de superación personal como el autor Víctor Frank. Además de la lectura la religiosa disfruta cantar y jugar vóleibol.
 
Para la hermana Maury Cúcuta tiene un ambiente de mucha acogida, se identifica mucho con la cultura cucuteña porque dice “que estar en Colombia es como estar  en Venezuela”,  asiendo la comparación en que las culturas son parecidas y relaciona el clima de Cúcuta con su ciudad natal agregando que  “la diferencia es que allá está el mar cerca y si tienes calor te vas para la playa en cambio acá no”.
 
Por último, la religiosa exhorta a los jóvenes a “seguir el camino vocacional. el Señor es una respuesta y es un servicio desinteresado, dando la oportunidad de estar en libertad y en disposición de servir, siendo una experiencia significativa donde seguir a Cristo vale la pena”.