Nada es imposible para Dios (palabras del ángel a Zacarías)
Hoy 5 de noviembre, la iglesia católica celebra a San Zacarías y Santa Isabel. La fama de estos dos santos se debe a que fueron los papas de San Juan Bautista y tíos de Jesús.
El nombre Zacarías, significa “Dios se acordó de mí”, Isabel quiere decir: “Consagrada a Dios”.
La bella historia de estos dos santos esposos la cuenta San Lucas en el primer capítulo de su evangelio en el que afirma que “ambos eran justos a los ojos de Dios y seguían en forma irreprochable a todos los mandamientos y preceptos del señor”.
El Evangelista San Lucas en su primer capítulo describe, Zacarías pertenecía a la clase sacerdotal de Abdías e Isabel era descendiente de Aarón. Ambos eran de edad avanzada y no tenían hijos porque Isabel era estéril.
Un día se le apareció el Ángel del Señor, y Zacarías al verlo se llenó de temor, el ángel le dijo: «No tema Zacarías, porque su petición ha sido escuchada. Isabel su mujer, dará a luz un hijo, a quien pondrán por nombre Juan
Él será para ustedes gozo y alegría, y muchos se alegrarán por su nacimiento, porque será grande ante el Señor; no beberá licores; estará lleno del Espíritu Santo, y convertirá a muchos hacia Dios y tendrá el espíritu del profeta Elías, para preparar al Señor un pueblo bien dispuesto».
Zacarías le preguntó cómo podía estar seguro de esto porque él y su esposa eran ancianos. A lo que el ángel contestó que él era Gabriel, el que está delante de Dios, y que había sido enviado para hablarle y anunciarle esta buena noticia.
Luego le dijo que se quedaría mudo por no haber creído. Cuando Zacarías retornó a su casa, su esposa Isabel concibió un hijo y ella pensaba: “Esto es lo que el Señor ha hecho por mí, cuando decidió librarme de lo que me avergonzaba ante los hombres”.
Cuando Juan nació todos se alegraban de la misericordia de Dios. Isabel comunicó que se llamaría Juan, Zacarías lo confirmó escribiendo ese nombre en una pizarra y al instante recuperó el habla.
Finalmente el papá de San Juan Bautista, alabando a Dios, pronunció el famoso “Cántico de Zacarías”, una de las oraciones que los sacerdotes y religiosos rezan cada mañana en sus oraciones llamadas “Laudes”.
Fuente: Aciprensa