“Todo lo puedo en cristo que me fortalece”
Así describe la hermana Piedad morales Osorno la confianza y el valor que deposita día a día en Dios, invitada al programa ‘Testigos de Fe’ de la emisora Diocesana Vox Dei, que se realiza en el contexto del Año de la Vida Consagrada, proclamado por el Papa Francisco, el 30 de noviembre de 2014.
Piedad Morales Osorno nació el 1 de septiembre de 1961, en Marsella Risaralda. Realizó su primaria en la Escuela Mariscal Sucre, cursó su Bachillerato en Santa Rosa de Cabal en el Colegio Vera Cruz, es Licenciada en Educación con énfasis en la Promoción de la Familia en la Universidad Santo Tomas, tiene 3 Diplomados de Legislación Educativa de la Javeriana en Bogotá.
Creció en medio de un estilo de vida tranquilo, donde el compartir con la familia era una de las mayores diversiones. El contacto con la naturaleza enseñó a la Hermana Piedad a amar, apreciar y cuidar el medio ambiente.
Formada en una familia caracterizada por la unión y respeto, su infancia transcurrió entre risas y muestras de afecta y orientación por parte de sus padres y hermanos. Jugar era el deleite de la hermana Piedad, quien se gozaba todos los paseos al rio con la familia. Este era uno de los momentos que más disfrutaba con sus hermanos.
Para la religiosa su mamá es un ejemplo a seguir: “mi mamá era una persona entregada al hogar, a sus hijos, muy católica, creyente, siempre confiando en Dios”, igualmente describe a su padre como una persona que les infundió muchos valores sobre todo el sentido de la responsabilidad, honestidad, el ser correcto y sincero: “mi papá fue una persona del campo, entregado al hogar y a sus hijos, siempre nos inculcó la importancia que tiene el rezar el rosario en mi casa y desde ese momento nunca ha faltado hasta el día de hoy”.
Siguiendo su corazón y con la ayuda depositada en Dios, la hermana Piedad respondió al llamado vocacional. Gracias a la “hojita del dominical”, en la que publicaban información religiosa y de formación, fue cultivando su fe. La “hojita” llegó a manos de la religiosa por medio de su papá quien todos los domingos iba a la iglesia del pueblo a escuchar la eucaristía.
La hermana Piedad recuerda que “en ese entonces en el campo no se escuchaba decir nada sobre la vocación, entonces como mi papá iba todos los domingos a misa, un día llevó la hoja a mi casa y me puse a leerla y decía ¿tendré vocación?, y a lo último de la hoja daban los datos para poder comunicarse, guardé la hoja y cuando pude me comunique y las hermanas me contestaron, desde allí comenzó mi vida vocacional”.
Desde ese entonces, la religiosa pertenece a la Comunidad Religiosa Hermanas de Jesús Buen Pastor Pastorcitas.
La trayectoria vivida por la Hermana la ha llevado a prestar servicios en Cúcuta, desde 1986 hasta 1990 en la Catedral de Cúcuta, en el despacho, catequesis, visita a los enfermos, familia y atención litúrgica. De 1990 a 1997 fue directora del Colegio Santiago Alberione; de 1998 hasta el 2004 prestó sus servicios en la parroquia San Benito en Caracas pastoral parroquial, en Bogotá Colegio Santiago Alberione, como profesora entre 2005 y 2006, en Cúcuta, apoyó con su servicio la acción pastoral de la parroquia Visitación de Nuestra Señora y en Bogotá en el Colegio Santiago Alberione, sirvió como Rectora.
Uno de los Personajes que más admira la religiosa es a Jesús Buen Pastor. Destaca de Él “su dedicación a la gente, su entrega, compasión, servicio, la acogida, el interés que pone por la gente y el amor a cada persona”.