Sacha Inchi, alternativa para la sustitución de coca en la región

Fotos: Centro de Comunicaciones Diócesis de Cúcuta

La planta Sacha Inchi, es muy beneficiosa para la salud, ya que posee altos porcentajes de aceites saludables y proteínas, es una semilla oriunda de la selva peruana, tiene un alto contenido en ácidos grasos Omega 3 (más del 48%), Omega 6 (36%) y Omega 9 (8%). Asimismo, contiene antioxidantes como el alfat-ocoferol y vitaminas A y E.

La planta, se ha convertido  en una alternativa para la sustitución de cultivos de coca en la región, gracias a la fertilidad de las tierras del Catatumbo, su semilla  Sacha Inchi, poco a poco ha ganado extensiones de tierra en el país, debido a la gran variedad de productos que puede dar origen para su venta. 

El fuerte impacto que puede dar la producción de la planta, se debe a las muchas ventajas que trae para el cuerpo humano el consumo de la misma, unas de ellas son el refuerzo del sistema inmunológico, la regulación de  la presión arterial, por lo que protege frente al infarto y la trombosis; la reducción de la tasa de triglicéridos, mejor control del colesterol, ayuda a perder peso, retrasa el proceso de envejecimiento, por su alta tasa de antioxidantes, combate el cansancio, el estrés, el agotamiento nervioso y el insomnio; aporta beneficios en el tratamiento de la enfermedad de Crohn, entre otras.

Para Aura Carlota Aparicio, dueña de una pequeña empresa cucuteña llamada ‘Wilkalu’, donde se trabaja específicamente con la planta, dice que “es muy beneficiosa para la salud, es mejor que el aceite de oliva y su siembra es muy productiva”; espera que el Gobierno Nacional, establezca en todas las zonas cocaleras, el remplazo de los cultivos con la semilla Sacha Inchi.

A pesar de que a la región llegó hace poco, su potencial para entrar a nuevos mercados nacionales e internacionales ha hecho que cada vez más productores locales se interesen en el  negocio.

Parmenio Tinoco, líder de la unidad Sachatibu,, explicó que “hasta la fecha van 17 hectáreas sembradas en Tibú, donde algunos productores tienen menos de 60 plantas en sus huertas”.