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Los Jóvenes Que Trabajan Por Paz

Como una forma de acercar la realidad del país a las aulas universitarias y de permitir que los estudiantes salieran de las mismas surgió Opción Colombia, una corporación sin ánimo de lucro, que con el tiempo fue sembrando sus semillas en los diversos municipios y departamentos de Colombia.
Unos jóvenes inquietos de Boyacá decidieron que la mejor manera de trabajar por la paz del país era involucrándose con la realidad de este. Ellos nos cuentan sus experiencias vividas, en su gran mayoría en zonas con grandes conflictos emanados por la violencia.

Pese a que Opción Colombia se encuentra en receso, la inquietud para contribuir con la paz del Colombia continúa es así como Germán Zorro estudiante de último semestre de la Universidad Santo Tomás continúa liderando el proceso en su universidad, «quienes estén interesados en vincularse al grupo pueden hacerlo en Bienestar Universitario».

Ellos cuentan sus experiencias

Victoria Pico, comunicadora social-periodista de Uniboyacá.
«Trabajé mi práctica universitaria en el Urabá antioqueño, allí conocí el dolor que produce la violencia y también el optimismo con que sus gentes trabajan para impedir que esta vuelva a su región, de ahí afán vertiginoso con que sus gentes trabajan para hacer de su zona una de las más importantes del país.
En Apartadó (Antioquia), mi aporte como estudiante fue enfocado a crear y acompañar los procesos de organización comunitaria (con desmovilizados y jóvenes), Ahora y después de esta experiencia de seis meses en 1988, si pensando que sin un replanteamiento del poder en sus diferentes manifestaciones, nunca será posible tener paz.

Fernando Nossa comunicador social Uniboyacá.
«Opción Colombia ha sido una filosofía de vida, dado que en la corporación se han reunido un grupo de personas dispuestas a trabajar por el país, trabajé en Necoclí, un municipio del Urabá antioqueño. Allí aprendí a valorar a mi gente, y a conocer aspectos de la violencia que aquí en Tunja no hubiera podido aprender. Lo anterior me sirvió para tener conciencia del conflicto que vive Colombia y para que a partir de mi experiencia individual comience a edificar paz.

Douglas López arquitecto de la Universidad Nacional de Medellín.
Fui a realizar mi práctica en Leticia y aprendí a respetar y a enriquecerme a partir de la diferencia dada por ideologías, conceptos y personalidades. Mi actitud frente a la Fuerza pública cambió totalmente, pues por ser estudiante de una universidad pública tenía un concepto que fue revalidado sobre instituciones como la Policía y el Ejército. Montamos un taller sobre resolución pacífica de conflictos que fue aplicado en diversos sectores en donde la situación de orden público era difícil. Apliqué conceptos de convivencia que si bien es cierto no se vieron al momento, a largo plazo están dando resultados positivos».