Catequista, sígueme
Fue la consigna que alrededor de 500 catequistas proclamaron a viva voz, en el coliseo del colegio Municipal, al celebrar su fiesta, como una forma de dar gracias a Dios por los frutos sembrados y recogidos durante el presente año.
“La fiesta del catequista es una experiencia de fe y de encuentro con Jesucristo, en donde por medio de la Eucaristía, la alabanza y los diversos actos culturales, estos servidores del Señor le dan gracias a Él y comparten su amor y su entrega en la educación de los futuros cristianos” afirmó el padre Fredy Ramírez, delegado Diocesano de Catequesis.
El encuentro inició con la Sagrada Eucaristía, presidida por el padre Fredy Ramírez, quien desatacó el servicio y compromiso de los catequistas quienes, siendo como racimos de la viña del Señor, ayudan a la expansión del Reino de Dios.
El sacerdote también motivó a los asistentes a ser luz para los niños y jóvenes que se preparan para recibir los sacramentos de iniciación cristiana en las parroquias y centro educativos en la Diócesis.
Terminada la eucaristía, actos culturales típicos de la región, tamboras y orquestas musicales, animaron y engalanaron la celebración, en que se premió la mejor propuesta cultural que presentó una de las vicarías sobre ¿cómo llegarles hoy a los niños y a los jóvenes?
La jornada concluyó con la invitación a los catequistas a vincularse activamente en el proceso de preparación para el Sínodo Diocesano 2016, como una manera de revisar, reflexionar y proyectar la evangelización y la catequesis para los próximos.